«¡Queridos hijos! También hoy os invito a la oración. Ahora, como nunca antes, mi plan ha comenzado a realizarse. Satanás es fuerte y quiere arrasar con mis planes de paz y de alegría y haceros pensar que mi Hijo no está firme en vuestras decisiones. Por eso, os invito, queridos hijos, a orar y a ayunar con una firmeza aún mayor. Os invito a una renuncia por nueve días, a fin de que, con vuestra ayuda, todo lo que Yo quería que se realizara por medio de los secretos que comenzaron en Fátima pueda cumplirse. Os invito, queridos hijos, a comprender la importancia de mi venida y la seriedad de la situación. Yo quiero salvar a todas las almas y presentarlas a Dios. Por eso, oremos para que todo lo que he comenzado se realice cabalmente. Gracias por haber respondido a mi llamada»
Archivo de mensajes
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Mensaje del 25 de Agosto de 1991
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Mensaje del 25 de Julio de 1991
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Mensaje del 25 de Junio de 1991 – 10 Aniversario de Apariciones
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Mensaje del 25 de Mayo de 1991
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Mensaje del 25 de Abril de 1991
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Mensaje del 25 de Marzo de 1991
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Mensaje del 25 de Febrero de 1991
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Mensaje del 25 de Enero de 1991
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Mensaje del 25 de Diciembre de 1990
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Mensaje del 25 de Noviembre de 1990
Mensaje del 25 de Agosto de 1991
«¡Queridos hijos! También hoy os invito a la oración. Ahora, como nunca antes, mi plan ha comenzado a realizarse. Satanás es fuerte y quiere arrasar con mis planes de paz y de alegría y haceros pensar que mi Hijo no está firme en vuestras decisiones. Por eso, os invito, queridos hijos, a orar y a ayunar con una firmeza aún mayor. Os invito a una renuncia por nueve días, a fin de que, con vuestra ayuda, todo lo que Yo quería que se realizara por medio de los secretos que comenzaron en Fátima pueda cumplirse. Os invito, queridos hijos, a comprender la importancia de mi venida y la seriedad de la situación. Yo quiero salvar a todas las almas y presentarlas a Dios. Por eso, oremos para que todo lo que he comenzado se realice cabalmente. Gracias por haber respondido a mi llamada»

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